A mi nadie me quizo hacer caso cuando predije que mi vida no sería de esas largas y contables, de esas que van más allá de los treinta y se inundan de canas con nietos señalándolas. Me queda la satisfacción de haberlo sabido siempre y seguirlo haciendo.
¿Cómo te ves en diez años? Imposible que alguien pueda verse en el futuro, hasta la fecha no se ha inventado algún aparato que te lo permita. En diez años ni me veo, no me siento ni me huelo. "En diez años" no existe, no es, ni está.
Etiquetas: a meyo, enfermedad
1 Comment:
-
- Javier said...
1 de agosto de 2008, 16:27Ah cabron! Que??
Entrada más reciente Entrada antigua Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)